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FERNANDO J. LUMBRERAS
Rigoberta Bandini sigue dando forma a su esperado segundo álbum, Jesucrista Superstar, con el lanzamiento de Soy Mayor, una canción que ahonda en los miedos, inseguridades y reflexiones que surgen con la adultez. Con su característico sello de autenticidad y vulnerabilidad, la artista catalana nos invita a un viaje de introspección a través de melodías cargadas de sinceridad.
Desde que irrumpió en la escena musical con éxitos como In Spain We Call It Soledad, Ay Mamá o Perra, Rigoberta Bandini no ha dejado de crecer como una de las voces más representativas del panorama nacional. Sin embargo, su regreso no ha sido un simple retorno, sino una evolución sonora y emocional que se materializa en este nuevo trabajo.
Con adelantos como Kaimán, Pamela Anderson y Si Muriera Mañana, Bandini ha ido construyendo un álbum que rompe con los moldes del pop convencional. Soy Mayor sigue esta línea, combinando una producción exquisita –a cargo de Stefano Maccarrone y Esteban Navarro– con una lírica que aborda la madurez desde una perspectiva honesta y sin artificios.
El tema nos habla de ese punto en la vida donde la infancia quedó atrás, pero aún no se siente haber alcanzado del todo la adultez. La inseguridad del «aprendiz de la vida» sigue presente, y las responsabilidades pesan más que nunca. Rigoberta, con su estilo único, transforma esta sensación en una canción necesaria, de esas que acompañan y reconfortan, reflejando una vez más su capacidad para conectar con el público a un nivel profundo y personal.
Con Soy Mayor, Rigoberta Bandini reafirma su posición como una de las artistas más influyentes de su generación. Su música, lejos de ser solo entretenimiento, se ha convertido en una forma de exploración y catarsis que muchos pueden sentir como propia. Sin duda, Jesucrista Superstar promete ser un álbum que marcará un antes y un después en su trayectoria.
