La analítica como prueba de medicina personalizada

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La medicina, por suerte, cada vez tiene más aliados a la hora de diagnosticar de forma rápida, eficaz y, sobre todo, precoz.

Gracias a la investigación se están consiguiendo grandes avances que, al entender las variables medibles de la sangre y de las distintas pruebas, se permite tratar de forma rápidamente cualquier dolencia.

De ahí no solo la importancia de acudir a las revisiones sino, también, apostar por realizarse analíticas generales y más específicas según las prescriban los profesionales.

¿Cuáles son las analíticas más solicitadas?

Para empezar, según cuentan laboratorios como MyLab son, cada vez más, los pacientes que se acercan no solo para las pruebas Covid que necesitan bien por viajes o por seguridad antes de reunirse con algunos familiares, sino que hay todo un abanico de opciones que demuestran las posibilidades de un buen laboratorio.

A las analíticas clínicas normales que solicita un médico en algún chequeo, se unen hoy en día una serie de análisis bioquímicos y microbiológicos que permiten determinar una serie de tratamientos de importancia.

«La gente piensa en análisis de sangre. Pero la orina, heces, semen o plasma aportan también muchísima información» explican.

Aún así, hablan de una tendencia que tiene mucho que ver con la alimentación. La consultoría de alimentos e incluso para conocer las intolerancias son vitales para la salud. «Hasta hace poco todo este campo de investigación estaba poco desarrollado, sin embargo, en los últimos años, los laboratorios determinamos cómo la alimentación reacciona en cada persona, permitiendo así casi hacer la alimentación a medida para mejorar la salud y bienestar de los pacientes» explican.

Estos análisis pueden llegar a testar hasta 200 alimentos a la vez, mejorando considerablemente sintomatologías como la fatiga, el dolor de cabeza o estómago, algunos problemas de piel o, incluso, el sobrepeso.

Esta prueba diagnóstica, que es rápida, está cambiando la vida y la dieta de miles de personas, mejorando su capacidad y rendimiento y, sobre todo, permitiendo evitar malestares innecesarios.

Con una muestra de sangre se definen muchísimas variables de la que se ha venido a llamar medicina personalizada.